viernes, 31 de enero de 2014

Llega la Biblioteca humana



Nos lo han contado hoy en el Café Zorrilla, de la Plaza Mayor. Los escritores José Manuel de la Huerga, Fernando del Val y Echeve han presentado un proyecto novedoso y abierto que quieren poner en marcha a partir de la próxima semana. Lo llaman La biblioteca humana. Ésta es su declaración programática:


"La BIBLIOTECA HUMANA tiene la vasta dimensión de una persona. En la dedicatoria de Canto a mí mismo Whitman escribe: `Esto no es un libro. Quien lo toca está tocando a un hombre.´

En esa perspectiva de zoom sobre el rostro de un lector, los autores que convocamos esta Primera Edición Mesacamilla de La BIBLIOTECA HUMANA pretendemos hablar sin límites horarios de aquello que nos inquieta la mayor parte de nuestras horas (in)útiles: la literatura y, por extensión, la creación en todas sus variables (música, fotografía, pintura, cine o urbanismo…) 

Nos parece que el ESPACIO de intervención de una Biblioteca Humana requiere una puesta en escena acorde con el espíritu horizontal, dialogante y muy cercano a cualquier lector que impulsa nuestra propuesta cultural: en mesas de tamaño humano, con cuatro o cinco contertulios, cada autor propondrá lecturas, especialmente de las obras de los otros dos compañeros, en este “golpe de dados” azaroso de la velada. Generará diálogo, abrirá debate, escuchará al lector en una dinámica sin red, a corazón abierto… Hará tertulia. 

Las TRES OBRAS PROPUESTAS establecen tantos puentes en común como islas podrían volverse en otros momentos de lectura ensimismada. Están seleccionadas con intención de abrir perspectivas, artísticas y lectoras. Las tres responden a géneros literarios HÍBRIDOS: poesía, narrativa, ensayo, propuestas lúdicas e intervenciones en ciudades, lejanas o muy próximas (Nueva York, Lisboa, tu propia ciudad, querid@ lector…) 

Las cerezas del diálogo serán extraídas del cesto de la creatividad con pasión vehemente o con razonable aquiescencia, y estas, de seguro, arrastrarán otros frutos redondos y carnosos, los ecos de otras ciudades, libros, músicas o cuadros… evocados por la emoción del encuentro. 

Cada diálogo en cada mesa camilla será irrepetible, imposible de reproducir. 

Cualquier lector que ame lo hermoso querrá participar, sentarse a hablar con otros lectores, desconocidos, que presumiblemente emitan mensajes de náufrago de isla en una misma longitud de onda. 

Cualquier lector que esté sentado en una mesa, querría disfrutar del don de la bilocación para estar, escuchar, participar en las otras restantes. Pero, por fortuna, eso es imposible, deberá esperar a que haya un hueco para él.

Al final de la velada los libros permanecerán. 

Como sin duda también permanecerán las relaciones, nuevas, siempre nuevas, que este primer encuentro de La BIBLIOTECA HUMANA trenzará de forma tan permanente como efímera. 

Una banda sonora para cada libro.

Imágenes proyectadas sobre las ciudades rastreadas. Conversaciones, tertulia entre lectores con un café, una cerveza, un vino…"



La BIBLIOTECA HUMANA, edición Mesacamilla, comenzará su andadura el próximo Jueves 6 de febrero en el Café Zorrilla, a partir de las 20,30. Fernando del Val, Echeve y José Manuel de la Huerga participarán como anfitriones. Pero será la intervención de los asistentes que se apunten lo que proporcionará el juguillo que permita recuperar el tradicional espíritu de tertulia. Aunque formalmente todo parezca de otra manera.








miércoles, 29 de enero de 2014

Ana Pérez Cañamares nos hablará este viernes de las sumas y los restos




Vuelve Ana Pérez Cañamares a nuestra librería para presentarnos su última hornada de poemas. Las sumas y los restos, V Premio de Poesía Blas de Otero Villa de Bilbao 2012, está editado por Ediciones Devenir/ el otro. Estará acompañada por el editor, Juan Pastor, y será presentada por la también poeta Belén Artuñedo.

Como una rosa de los vientos el libro se basa en los cuatro puntos cardinales para distribuir sus poesías. Los puntos cardinales existen para orientarse en la dirección y mantener el rumbo. ¿El destino? La búsqueda de los tesoros, en este caso. Pero será la autora quien se encargue de clarificarnos la navegación, o la andadura, de quien se sabe entre océano proceloso, tierra fértil o desierto para ejercitarse y tener éxito en su búsqueda. Como cuenta Ana a Laura Fraile en una entrevista en Último cero, "esta obra es un mapeo que habla de dónde estaba en el momento en el que lo escribí y que hace referencia a cuestiones como de dónde vengo, a dónde quiero ir o qué es lo que tengo al lado."

Quedáis invitados, por lo tanto, este VIERNES 31 DE ENERO, a las 20,00 horas, en la Librería de la calle Librería. Seguro que nos lo pasaremos bien sabiendo de muchas sumas y de los inevitables restos.  







lunes, 27 de enero de 2014

Javier Lostalé a Fernando del Val: "Cada vez creo más en la vida generada por el lenguaje"


Fernando del Val con Javier Lostalé, callejeando por la Rúa Oscura


Dos mil trece, año grande para Javier Lostalé. Renacimiento publicará antes de verano una antología de su obra, a cargo del poeta José Cereijo: Azul relente. La gran noticia vendrá hacia el otoño, cuando Pre-Textos prevé lanzar El pulso de las nubes, su nuevo libro. En él, el lenguaje se radicaliza y vuelve más reflexivo que nunca. La sombra de lo que podríamos denominar vejez, o de lo que el autor percibe como tal a la vista de su dinamismo, asoma la garra por debajo de la puerta; una sombra nacida por el efecto, al otro lado, de un sol devastador.

           -En El pulso de las nubes hay una mirada interior que se podría confundir con la confesional. ¿Esta segunda, incontenida, es una merma? ¿Cómo haces para sortearla?
-En las épocas de adolescencia y de primera juventud, en que el amor es una cuestión sin límite, la poesía suele adoptar un tono confesional, sí, que predomina, incluso, sobre los elementos formales. A medida que la escritura avanza, la persona se va dando cuenta de que la poesía en la vida es la vida que crean el poema y el lenguaje. Por eso se es poeta sólo en los momentos en que se escribe. La realidad es el instante de la creación. Cada vez creo más en la vida generada por el lenguaje.
-El poema no cuenta la vida, entonces; la crea.
-El poema crea la vida. Por eso decimos, ya parece un tópico, que la salva. Tormenta transparente contiene historias de amor que ya me habría gustado vivir fuera de la escritura.
-… “Nunca fue más bello el engaño”...
-… nunca fue más bello el engaño… el arte es una mentira, pero una mentira de gran belleza. La verdad de las mentiras, dice Vargas Llosa. La ficción, en general -y la poesía tiene mucho de ella, aunque hay quien opina lo contrario-, salva convirtiendo la mentira en verdades individuales.
-¿Qué has descubierto de ti en El pulso de las nubes?
-Que me gustaría ser como lo que escribo. Me descubro torpe en la vida.
-¿Qué papel juega el inconsciente?
-Siempre influye, pero, como decía Vicente Aleixandre, debe estar atemperado por el rigor y la voluntad. La verdadera creación ha de estar llena de consciencia.
-¿En la consciencia dominadora de El pulso de las nubes está presente Hondo es el resplandor, tu libro de mil novecientos noventa y ocho?
-La verdad, no veo ninguna relación. El libro al que lo veo más unido, aunque no tiene que ver, es Tormenta transparente
-… en estilo y léxico, sin duda. Me refiero a que vuelves a escoger un concepto, vertiéndolo en el título, para a continuación definirlo a tu manera, poéticamente.
-En eso tienes razón. Pablo García Baena me dijo precisamente que una de las cosas que le gustan del libro es la capacidad que hay en él de exprimir los temas -el vértigo, la soledad,…- desde un punto de vista radicalmente poético. Por eso, la repetición en el verso del concepto reflejado en el título resulta adecuada a mi propósito.
-La soledad, en el libro, es más factor de serenidad que causa de dolor. ¿Refleja tu obra, a medida que crece, una mayor aceptación del mundo, una postura más consonante?
-Pues te diré que sobre todo donde está habiendo aceptación es en el libro que estoy comenzando, Borrado y celeste, del que, en estos momentos, tengo escritos tan sólo dos poemas. En mí hay una dualidad: soy consciente de que la muerte no está lejos, pero continúo sintiendo la vida como en las mejores épocas. ¡Ni siquiera he perdido el deseo sexual!




sábado, 25 de enero de 2014

Las Política sesions de Miguel Velayos




Puntualmente, ayer tarde el poeta abulense Miguel Velayos nos recitó poemas de su último libro Política sesions. Como describía Laura Fraile en Último cero, el libro "está dividido en tres partes (Dj Ágora, Dj Sanaratiicha y La Rave de la Esperanza), a lo que hay que añadir un `Versus track´ en el que el poeta incluye un último poema llamado `A bocanadas de aire con la vida´, este libro pretende ofrecer un matiz distinto a un tema del que tanto se ha escrito, dice, incluyendo una voz que habla desde su tiempo, en palabras de Velayos. Es un poemario que tiene muy bien marcados los referentes temporales y que abarca desde el año 1936 hasta la actualidad. Parto de la Guerra Civil para ir pasando por temas como el del conflicto terrorista, Europa, la inmigración o las instituciones europeas que nos gobiernan y a las que estamos sufriendo, continúa." 





Para Laura Fraile, "Política sesions es un libro que se detiene en los bandos enemigos de la Guerra Civil española, que recuerda las fosas comunes y que avanza hasta la Europa del siglo XXI, ésa en la que han levantado muros, en la que habitan tantos miedos, en la que crecen las cárceles, en la que siguen disparándose balas. Miguel fija su mirada en la emigración, en el mercado libre que produce viejos pantalones fabricados en Manila y chaquetas zurcidas por un dólar en Honduras, en todos esos muchachos de la Habana que bailan en plena calle, ajenos aún a las preocupaciones de la vida adulta. También hay un recordatorio a las cifras del Sur, a ésas que hablan de las 20.000 personas muertas en El Estrecho, un recordatorio a las fotos de Gervasio Sánchez, a toda una generación perdida buscando la libertad."




Humildad

No digas más palabras que luego no comprendas
con los ojos, no digas más mentiras a quien siempre te quiso,
a quien toca tu cuerpo como si fuese harina,
a quien busca tu cuerpo como si fuese pan;
no digas más mentiras, no exageres los verbos, no repitas promesas
que el tiempo censuró a causa del orgullo.
La palabra alegría es sencilla y humilde
porque viene del mundo, y de nuevo, a su seno
pretende regresar, convocando a los hombres
debajo de su luz. La palabra alegría, la palabra silencio...

...La palabra humildad... 




jueves, 23 de enero de 2014

Miguel Velayos, doble sesión mañana 24 de enero




Este viernes Miguel Velayos nos presenta su libro Política Sesions, editado por Vitruvio. Con una poesía de carácter social y comprometido, su forma de decir y sus versos os van a sorprender. Las citas con que inicia el libro como las que encabezan las tres partes en que se divide no tienen pérdida y dan la medida de las preocupaciones del poeta. Véase ésta del pedagogo brasileño Paulo Freire: "La libertad, que es una conquista y no una donación, exige una búsqueda permanente. Búsqueda que sólo existe en el acto responsable de quien la lleva a cabo. Nadie tiene la libertad para ser libre, sino que al no ser libre lucha por conseguir su libertad." ¿Será la poesía un medio para esa libertad? ¿O más bien un cómplice para seguir sin poseerla? ¿O acaso un elemento que acompaña a rescatar la esperanza? Como bien lo tiene presente Velayos, decía la poeta polaca Wislawa Szymborska:

"Heredamos la esperanza,
regalo del olvido."

Más tarde, en el Bar La curva, jam poética con Miguel Velayos como invitado. Os esperamos.




A bocanadas de aire con la vida

A bocanadas de aire con la vida,
a súplicas profundas con este corazón,
a cadena perpetua con el mismo entusiasmo,
a zancadillas lentas contra el frío,
a solas con tu voz, a solas con tu luz,
para hablar de verdad, para, al fin confesarnos
que el tiempo no corrompe
a bocanadas de aire con la vida...


(De su último libro, Política sesions)




lunes, 20 de enero de 2014

Los poemas que vienen del frío, recitados por Julia Conejo Alonso




El pasado viernes Julia Conejo Alonso nos presentó su último libro de poemas, Para qué sirve el frío. Ya anteriormente había publicado Muñecas recortables, Premio Joaquín Benito de Lucas 2010, y Peces transparentes, Premio Alfons el Magnànim 2012.

Ya desde el título, Julia nos plantea lo que a primera vista aparenta ser una pregunta retórica para la que, como tal, no hay respuesta. Así parece reconocerlo ella misma en uno de los poemas. Sin embargo, es una pregunta que puede responderse, porque plantea un conflicto siempre actual: el existente entre el pragmatismo imperante y la estética. O lo que es lo mismo, el conflicto entre aquello cuya utilidad se mide en términos prácticos o de rendimiento económico y aquello cuya utilidad escapa a esos parámetros. Porque existe una utilidad de lo inútil, una utilidad distinta, que es la del frío, las lágrimas o la poesía. Y todo esto subyace en el poemario, especialmente en la última sección, donde las palabras se convierten en instrumento para un eficaz e irónico contraste entre estas dos visiones. 



Resuelto el dilema que propone el título, podemos preguntarnos ahora cuántos fríos hay. A lo largo del libro, descubrimos varios que quizá no agoten el catálogo: desde el más obvio, que es el frío exterior que miden los termómetros, hasta el más sutil, que es el frío interior. Están el frío nostálgico de la infancia, “algo salvaje e irrecuperable” y el frío de la entrada en la madurez, ese tiempo en que “es demasiado tarde / para casi todo”. El frío triste de la vejez y el frío de unos muertos que parecen no haberse enterado de que ya lo son y siguen impacientándose por preocupaciones cotidianas. El frío de la soledad individual y el de una sociedad empeñada en llamar progreso y bienestar a la deshumanización de las relaciones.



Pero no todo es frío en este poemario. También asoma el calor tibio de una mañana soleada de diciembre a sus páginas. Lo hace con algunos poemas que parecen una tregua al “zumbido / aterrador / de la rutina” en los que la alegría es posible, una alegría hecha de gestos cotidianos, como la textura de un bizcocho al morderlo o soñar que vierte leche siempre fresca y aromática de una jarra en un cuadro de Veermer. Pero sobre todo el calor procede de la voz delicada y melancólica que nos habla en los poemas. Un calor que a veces asciende con el uso de la ironía, bien para matizar la pesadumbre, bien para revelar en toda su lamentable ridiculez las paradojas de nuestro mundo.

Poemas que vienen del frío, pero dichos por una voz cálida: eso es lo que hoy vamos a encontrarnos.


Jacob Iglesias.





miércoles, 15 de enero de 2014

Julia Conejo Alonso: ¿Para qué sirve el frío?




Reanudamos las presentaciones. Es un placer poder contar entre nosotros este viernes, 17 de enero, a las 20 horas, con Julia Conejo Alonso. Su anterior libro, Peces transparentes, publicado por Hiperión y premio Alfons el Magnànim, de Valencia, supuso un salto en su poesía. Ahora se presenta entre nosotros con un poemario nuevo: ¿ Para qué sirve el frío?, editado por Origami, que está apostando por los autores de Castilla y León con decisión. El libro, poesía de lo cotidiano, está fabricado con la cadencia de los días y la lentitud de lo que acontece tan rápidamente. Apelando a su timidez espero que nos veamos en la librería este viernes, para saber de qué sirve el frío. Un aperitivo...


POÉTICA

No soy, como Celaya,
artesana del verso.
No busco plenitud en las palabras
ni la inmortalidad.

Soy egoísta y manipuladora:
Utilizo el lenguaje
cuando lo necesito,
cuando me falta el aire,
cuando noto que ha dejado de trotarme
la sangre por las venas.

Igual que los diabéticos
se inyectan insulina.

No es arte, ni altruismo.
No es conciencia social,
ni egolatría.

Es solo instinto de supervivencia.



lunes, 13 de enero de 2014

Casilda García Achilla caza de nuevo




Los instantes de la lectura




Existe un instante en toda lectura que apenas se advierte. Un instante de vacío. Tal vez se medita y se le concede un breve tiempo de dispersión. Acaso se produce un dulce transcurso en que solo se piensa en las musarañas. Es cuando el lector hace una parada y no suelta el libro. Existen múltiples variantes. Son como poses, pero también caricias. El libro se palpa solamente. El libro no se cierra y se introduce un dedo para que no se escape la página. El libro se coloca sobre el regazo. El libro se coge con ambas manos y se aproxima al mentón. El libro se cierra, marcapáginas de por medio, y se acaricia su portada o su lomo. El libro se deja sobre los muslos con la palma de la mano depositada sobre la doble página abierta. El libro se levanta y se frota contra una de nuestras sienes. El libro se eleva por encima de nuestra cabeza como emblema, enarbolado por una mano que no es ni mano alzada ni puño obtuso, sino otro estado. El libro se deja contorsionar por los diez dedos. Salvo en esos momentos de traición suscitados por la somnolencia nocturna, en que el libro puede deslizarse y caer, tendemos a amarrar el libro. Es el libro materia, no solo el libro texto. Un volumen, un tamaño, una textura, una calidez, un aroma. Un símbolo histórico. Un soporte cuestionado. La percepción que el libro aún ofrece y que el ebook no creo que todavía aporte. Tal vez por eso me guste esta fotografía de Marta Vicente. El libro se acuna. El libro se tensa como adarga. El libro va a proyectar los rayos del sol como un espejo. Las manos miman un cuerpo. Una otra clase de cuerpo. Tal vez el cuerpo que más tocamos.


sábado, 4 de enero de 2014

Los lectores vienen desde lejos




Más de cinco siglos y medio nos contemplan desde esta pintura de Vincenzo Foppa. Ha cambiado el mobiliario, la vestimenta, acaso la clase social, probablemente el paisaje. Permanece el libro como soporte. No me cabe duda que también ha llegado hasta nuestros días el texto, sea cual fuere lo que el muchacho lea. Pero hay algo inalterable, algo que otorga actualidad y juventud a la tarea: la acomodación del cuerpo a la lectura. Ese ensimismamiento armonizado con la calma. ¿Leerá el libro hasta el final? ¿Hará paradas? ¿Se estirará para el reencuentro de su anatomía con el relato? ¿Pensará recomendarlo? Las respuestas en cualquier joven lector de ahora mismo. Tal vez tú, que lees esta entrada.